lunes, 22 de junio de 2020

Se visten como p...

Esto va de política. Y de moral. De ver qué nos importan más, si las personas o los objetos físicos. De ver si tenemos valores o si los confundimos con sus símbolos.
Seguro que han oído esa burrada, que culpabiliza a la víctima, ¿no? "¡Cómo no va a haber violaciones, si algunas se visten que parece que van buscando jaleo!". A veces, se lo oímos decir a algunas mujeres. Nada de criticar al "pobre" violador, que no pudo hacer sino seguir sus instintos, en la situación en la que le habían puesto.
Y esa situación no era otra que ver pasar a una mujer guapa delante suyo. Pongamos que le pasaran muchas mujeres guapas por delante, y muchas vestidas de esa forma que algunos califican como "de buscar jaleo". Llevemos las cosas al extremo y pongamos que ese hombre sienta deseo sexual desde los 13 a los 83 años.
Son 70 años de sufrir provocación. Pobre hombre. Y algunas desconsideradas lo provocan, vistiendo como lobas. Claro, luego pasa lo que pasa, ¿no?
Estoy siendo sarcástico (por si acaso). Así que, no, la culpa no es de la mujer. Si pinto mi casa, no es una invitación al grafiti. Si aparco mi coche cerca de alguien con una llave en el bolsillo, no es una invitación a que me lo raye. Si alguien dice la sandez de que algunas se lo buscan, no es una provocación para que le respondan a la sandez dejándolo sin dientes (pero igual una bofetada no le vendría mal).
Estoy de acuerdo en que no viene mal ser consciente de que hay mucho descontrolado por ahí; pero ese descontrolado también puede rayar tu coche, robar tu bici, quemar tu casa, secuestrar a tus hijos mientras juegan en el parque, y en todos esos casos, está claro que el culpable es el descontrolado. El porqué está claro: ha atacado al sistema.
Sólo que, en este sistema nuestro, en el que todos somos iguales pero unos somos más iguales que otros (gracias, George Orwell), existen minorías con menos derechos. Y la mujer es una de esas minorías.
Resulta curioso (por llamarlo de alguna manera) que muchos de quienes culpan a la mujer también acusen a "los negros" (a todos y cada uno) por la destrucción de estatuas que estamos viendo en muchos países. Son malos, son de izquierdas, están organizados, luego vamos nosotros y blablablá. Yo estoy en desacuerdo con la destrucción de estatuas, pero cuando llega a su "destitución"... Mira, llevémoslas a los museos. Pero es que eso tampoco satisface a los que defienden los derechos las estatuas (y algunos, además, a los violadores). Poco importa (a ellos) que los motivos por los que se derriban las estatuas sigan existiendo. Habrá organización, no lo dudo, y elementos de izquierdas o de derechas (que también), y manipulación, pero el hecho es que el racismo lleva cientos de años existiendo. La esclavitud encubierta sigue existiendo en campos que darían, cada uno de ellos, para un reportaje exhaustivo. No son 70 años, ésos que veíamos más arriba, sino cientos de años.
No defiendo la destrucción de las estatuas, porque no estoy a favor de ella. Yo preferiría que se bajaran las estatuas y se colocaran en museos con explicaciones pertinentes, para que no se olvide la Historia, incluso los individuos y comportamientos denostables, e intentar, con ello, que se repita con menos frecuencia. Entiendo las protestas, porque hay una historia varias veces centenaria de opresión, de injusticia, de crímenes impunes. Que sí, que la ha habido también hacia los blancos, pero... primer, seguimos dominando, y segundo, no hablo de hacer justicia histórica, sino de solucionar un problema actual. No es lo mismo que un niño pegue con todas sus fuerzas a un adulto a que sea al revés. O que alguien cansado y malnutrido pegue a alguien fuerte y preparado. El acto en sí de pegar es malo; el nivel de maldad de cada actor es diferente.
Vamos a ver si me centro. ¿Qué quiero decir?
Lo que quiero es denunciar esa disonancia cognitiva (o hipocresía, quizá), por la que algunos quitan culpa a un hombre "provocado" (sic) pero se la aumentan a un colectivo oprimido y harto de estar oprimido, tan harto como lo estaríamos todos en su situación. ¿Qué es más importante, la integridad de las personas o la de las estatuas?

Algunas personas argumentan que una estatua representa "unos valores, no es sólo un objeto físico". Y yo estoy de acuerdo. Hay estatuas y monumentos que nos recuerdan valores morales, hazañas, ideales. En ese sentido, cada ser humano sobre la Tierra es un recuerdo de valores morales, de hazañas y de ideales que se nos escapan. Es cierto que un monumento, de forma ideal, debería mostrar esos valores de un modo universal; pero existe el peligro de que esos valores se identifiquen con el objeto que los representa, que el objeto se deifique, cayendo en la idolatría, y que se sieguen vidas por defender un objeto material. La Estatua de la Libertad no es la Libertad.
No es lo mismo estar reprimido que ser oprimido. Según algunos “popletas”, o confundidos, el reprimido tiene derecho a atentar contra personas y los oprimidos no tienen derecho a atentar contra objetos. Es la confusión moral a la que lleva adorar a becerros de oro.
Protejamos a la mujer, protejamos a las minorías, y después ya hablaremos de las estatuas. Que igual estamos adorando a las efigies de personas equivocadas olvidándonos de lo que es realmente importante—y luego (ahora sí que sí) pasa lo que pasa.

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